fbpx

Reducción de mamas

Reducción de mamas
marzo 29, 2018 EsteticaPilo
In Blog

Son muchas las pacientes que desean reducir su pecho (Mamoplastia de Reducción) por poseer un pecho demasiado voluminoso. Esto viene determinado por varios factores como la genética, el peso corporal, embarazos o la influencia hormonal. Puede aparecer al principio de la adolescencia o en edades medianas tras la menopausia, embarazos o el uso continuado de terapia hormonal.

Sin embargo, unos pechos grandes causan los mismos problemas en todas las edades debidos a su peso, tamaño y posición: Causan dolor de espalda, cuello, marcas en los hombros por el sujetador, diversas dermatitis o infecciones a repetición bajo el pecho, sensación de inhibición y estrés psicológico, étc….

Además de lo anterior, una de las quejas mas comunes es la dificultad de llevar ciertos vestidos o la de practicar deportes sin molestias….especialmente en verano.

Lo primero….tomar tus medidas actuales

Este primer paso en la exploración es sumamente importante, y  usamos una hoja especial para anotarlo. Existen diversas técnicas para realizar ésta intervención, y cada una de ellas se aplica dependiendo del volumen de tejido graso y mamario que haya que eliminar y la nueva forma que tendrá la mama en el resultado final. Además de éstas medidas, no te extrañe que  tomemos las medidas de cadera, cintura, tórax y contorno mamario: Se trata de averiguar si el volumen deseado una vez reducida la mama, armonizará con el resto del cuerpo. El volumen mamario que armonice bien en una mujer de tórax y caderas anchas es diferente al que se puede alcanzar en otra paciente con un tórax más delicado.

Siempre es importante escuchar a la paciente qué volumen desea alcanzar después de la intervención, para saber interpretar sus expectativas. El pecho se puede reducir todo lo que se desee, y en nuestra Consulta es frecuente que la paciente que desea éste tipo de intervención esté “harta” de sus pechos y quiera reducirlos excesivamente. En ése punto es donde nos debemos de poner de acuerdo con la paciente, ya que una reducción excesiva del pecho puede perjudicar a la forma que después obtengamos en la mama.

 

Lo segundo….elegir la técnica que vamos a usar.

La elección de la técnica más apropiada en cada caso en un tema de trascendental importancia, ya que implica dónde vamos a colocar las incisiones, qué forma va a tener la mama y qué grado de reducción desea la paciente. No se trata sólo de reducir la mama, sino de darle una forma más bonita y de colocarla en el sitio donde antes estaba situada.

Y la elección de la técnica viene en consonancia con las medidas que hemos tomado anteriormente. Mientras más caída esté la mama, mientras más piel sobre, la técnica aportará mayor o menor longitud de cicatriz en la mama…Desde una técnica periareolar, cuya cicatriz está solo alrededor de la areola hasta las clásicas T invertidas, existen toda una gama de posibles técnicas existentes.

En pacientes que deseen que se elimine todo su tejido mamario y al mismo tiempo no quieren perder su mama, existe la posibilidad de una reducción radical de la mama, sustituyéndolo por un implante mamario.

Este es el caso que nos encontramos en pacientes de alto riesgo hereditario de padecer cáncer de mama, o que su ginecólogo en una exploración mamográfica, haya detectado algún problema en su mama. (mastectomía radical profiláctica y reconstrucción inmediata con conservación de la propia areola-pezón de la paciente) ,muy popular en EE.UU. Se puede realizar y el resultado es óptimo, sin el aspecto que presenta normalmente una mastectomia ni la cicatriz horizontal en medio del tórax tan típico en mujeres mastectomizadas.

Como ves, son muchas las posibilidades, técnicas y factores que se tienen en cuenta para la realización de una reducción mamaria, y cada una de ellas se adecúa a cada caso en concreto.

Casi siempre completamos la reducción mamaria con liposucción de los laterales externos de la mama, para darle un aspecto más natural.

 

Recomendaciones antes de la intervención…..

Además de las pruebas preoperatorias de rigor (Analítica completa de sangre y electrocardiograma) es recomendable realizar previamente a la Cirugía, una mamografía a fin de determinar si existen lesiones mamarias que fueran interesantes de tomar muestras (biopsiar) durante la intervención, así como evitar la toma de Aspirina o complejos vitamínicos ricos en Vitamina E. En pacientes muy fumadoras (un paquete diario o más), deben de reconsiderar el someterse a ésta intervención, ya que la mayor parte de las posibles complicaciones (mala cicatrización, necrosis, etc.…) van de la mano del tabaquismo.

 

¿Cómo es el postoperatorio?

Después de la intervención, la paciente queda ingresada la primera noche en el Hospital, y normalmente se le da de alta al día siguiente de la intervención.

La primera sensación que nota la paciente es que…¡El pecho ya no le pesa tanto! A pesar de que hay inflamación  debido a la cirugía y un vendaje, ésa es la primera sensación que nos suelen comentar nuestras pacientes.

La intervención quirúrgica normalmente no suele doler….En la mayoría de los casos lo que siente la paciente es un poco de tirantez en la piel de la mama, por lo que la mayor parte de los analgésicos que solemos recetar en éste tipo de intervenciones, no las necesitará.

Una cosa es que no duela, y otra que la paciente no guarde reposo. Evidentemente, como en cualquier otro tipo de intervención quirúrgica, recomendamos a la paciente un tiempo de reposo de entre 8-10 días. Después de éste plazo, la paciente puede empezar a hacer sus tareas habituales. Grandes esfuerzos pueden realizarse a partir del primer mes a mes y medio después de la cirugía.

 

¿La reducción de mamas deja cicatrices permanentes?

Desafortunadamente, cualquier técnica de reducción mamaria deja cicatrices y éstas son permanentes, aunque se dejan en el sitio donde cualquier sujetador o bikini lo pueda ocultar.

La calidad final de la cicatriz depende de varios factores. Las técnicas para suturar que se usan no dejan hilos visibles “asomando” a través de la piel, por lo que obviado éste motivo, la calidad de la cicatriz dependerá del potencial de cicatrización que cada paciente posea.

Para obtener la mejor cicatriz que cada paciente nos pueda ofrecer, usamos al principio una serie de cremas específicamente diseñadas para esto. A partir de la tercera-cuarta semana, solemos recomendar el uso de apósitos de silicona durante una temporada que puede variar entre 2 a 6 meses.

 

 

Dr. José A. Barea Sánchez