Pérdida de volumen, combatir la grasa localizada, eliminar toxinas, depurar la piel y, por supuesto, beneficiar nuestra salud. ¿Cuántos de vosotros no os lo pensaríais dos veces para haceros con un método que reúna todo lo que hemos mencionado? Pues, os anunciamos que encontrarlo, gracias a la medicina estética, es mucho más fácil de lo que parece.
La presoterapia es el tratamiento estético que puede hacer realidad todo lo anterior. Así pues, no es de extrañar que sea considerada una de las técnicas más completas del mercado. Y es que, debido a sus múltiples efectos positivos es un must para todos aquellos interesados en mejorar su aspecto.
¿En qué consiste el tratamiento de presoterapia?
La presoterapia es un tratamiento enfocado al drenaje linfático. Para ello, es necesario que la zona a tratar (abdomen, piernas, brazos o glúteos) se introduzca dentro de un traje neumático dotado de múltiples cámaras de aire que ejercen una leve presión en el cuerpo del paciente. De esta manera, se mejora la circulación del flujo sanguíneo y se alivian los problemas relacionados con las arañas vasculares o las piernas cansadas.
A pesar de ser una técnica sencilla, sus resultados y beneficios son inmediatos. Además, no es invasivo ni doloroso, por lo que puede puede someterse a él cualquier persona que desee mejorar su bienestar. No obstante, hay ciertos colectivos que, para prevenir posibles riesgos, se recomienda que consulten previamente con un profesional sanitario antes de realizarse el tratamiento:
- Problemas cardiovasculares
- Enfermedades de la piel
- Problemas hormonales (hipertiroidismo)
- Pacientes oncológicos o enfermedades graves (VIH)
¿Qué propiedades tiene la presoterapia?
Debido a la presión moderada y totalmente controlada, la presoterapia es una técnica muy segura que carece prácticamente de efectos secundarios. Asimismo, la oxigenación del cuerpo nutre las células y estimula la depuración natural del organismo. Por tanto, sus ventajas, además de estéticas, mejorar la salud del paciente en aspectos como:
- Hipertensión arterial: la activación del sistema circulatorio y el drenaje linfático ayuda a reducir la presión de las arterias.
- Eliminación de edemas y linfoedemas: en ocasiones, la presoterapia favorece la reabsorción de la acumulación de líquido producido tras una cirugía, una lesión o una liposucción.
- Alivio del estrés: la estimulación de los puntos nerviosos motores, reduce los espasmos musculares y con ello la tensión. Esto se traduce en un estado de bienestar y relajación.
- Alivio de la pesadez de extremidades: olvídate de la molesta sensación de piernas cansadas y reduce la inflamación provocada por la retención de líquidos.
- Estimulación del sistema inmunológico: los ganglios linfáticos son los encargados de interceptar los agentes patógenos. Al mejorar la circulación, estos pueden reforzar su función y proteger el organismo.
- Mejora el aspecto de la piel de naranja: perfecta para combatir la celulitis gracias a la oxigenación de los tejidos.
¿Cuánto dura una sesión de presoterapia?
Cada sesión de presoterapia puede durar aproximadamente 20 o 30 minutos. Es recomendable combinarla con otros tratamientos estéticos como la cavitación para multiplicar los efectos de ambos.
Por último, el número de sesiones dependerá del estado de la piel y el objetivo que se quiera conseguir. Para ello, es necesario contar con los conocimientos y experiencia de un profesional dedicado al campo de la medicina estética.
En Centro PILO contamos con una unidad especializada. Pide una primera cita médica gratuita e infórmate sin compromiso. Estaremos encantados de acompañarte en el proceso hacia el bienestar.
